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La Asociación de Vecinos de la Cruz de Piedra, con la celebración de diversas actividades dentro de las Fiestas de la Cruz, continúa manteniendo viva una tradición que podría tener sus orígenes en el siglo XVII.

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Las actividades se abrieron el miércoles 30 de abril, con el Canto de los Mayos, a cargo del Coro Lírico del Centro de mayores de Villarrobledo, dirigido por Juan Bonillo Padilla.

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El grueso de las actividades se desarrolló el viernes 2 de mayo, a las nueve de la noche, y contó con la asistencia del alcalde de la ciudad, Valentín Bueno, la primera teniente de alcalde, Amalia Gutiérrez, la concejala de Juventud y Mayores, Cristina García, y el presidente de la Asociación de Vecinos de la Cruz de Piedra, Pedro Antonio Arnau, entre otros, El acto se abrió con el canto del himno a la Cruz de Piedra, con letra de Paco Melero, y música y cantos a cargo de Antonio Almansa, que en esta ocasión estuvo acompañado por un nutrido coro de colaboradores.

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A continuación se realizó un homenaje a personas destacadas del barrio, que en este caso correspondió al matrimonio formado por Manuel López Martínez, y Caridad Nieves Girón. Ambos son vecinos y activos colaboradores en la organización de las fiestas del barrio y muy populares en la localidad.

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Posteriormente, se llevó a cabo la lectura del pregón, a cargo año de Sebastián Carrasco Martínez, que basó su interesante pregón en los valores de la solidaridad, al tiempo que consideró a este barrio como un espacio siempre abierto a la convivencia.

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Por su parte, el presidente de la Asociación de Vecinos de la Cruz de Piedra, Pedro Antonio Arnau, agradeció a los asistentes su presencia en el acto, así como a las autoridades, medios de comunicación, Policía Local y colaboradores, por seguir haciendo posible este acto un año más.

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Del mismo modo, tuvo palabras de agradecimiento para los homenajeados Manuel López Martínez, y Caridad Nieves Girón, el Coro Lírico del Centro de Mayores, a la familia Almansa, a Sebastián Carrasco, y a Los amantes de la Copla, por su implicación en el programa de actos, al tiempo que recordaba las peticiones pendientes de esta Asociación al Ayuntamiento de Villarrobledo, principalmente en aspectos que afectan a la ordenanza de limpieza para este barrio.

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El alcalde de la ciudad, Valentín Bueno, cerró el acto destacando que se trataba de un día muy especial, que venía a marcar cada año los prolegómenos de la temporada estival, y felicitó a los homenajeados en el acto, así como a Sebastián Carrasco por su gran mensaje de solidaridad.

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Bueno, se refirió a la tradición de colocar cruces de término, normalmente hechas en piedra, en las entradas y salidas de la población, y dijo que este punto, que fue salida de la ciudad, se había convertido finalmente en el centro de la misma.

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Es preciso recordar que en Villarrobledo se instalaron tres cruces, una en la calle de la Virgen, otra en la Placeta del Rollo, y, en la calle Cruz de Piedra.

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Aún sin haberse visto nada escrito de las fechas de instalación de esta cruz, es de suponer que se instalara en fechas cercanas a la construcción de la vecina iglesia de San Sebastián, en el siglo XVII.

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La cruz también se hacía parada de los difuntos vecinos, que con su cortejo fúnebre iban a su última visita a la parroquia para recibir su último adiós. En Semana Santa era lugar de múltiples visitas, lo que se llamó “andar los pasos” a las cruces y monumentos.

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También era lugar de pláticas y sermones, misas de campaña, vía crucis, rosario de la aurora, y en los días de la cruz, engalanada la Cruz de Piedra recibía el canto del mayo a la cruz, con hogueras, música e invitación, como homenaje popular del barrio.

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Este monumento ha sido también un pedestal donde se publicaban los bandos públicos por el pregonero, y se hacía el canto de las horas y el estado del tiempo por los antiguos serenos.

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Las actividades conmemorativas finalizarán con la actuación de “Los amantes de la Copla”.

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La Asociación de Vecinos de la Cruz de Piedra, que tiene su sede social en los salones parroquiales de la iglesia de San Sebastián, tiene como fines los de promover la mejora física del barrio, instar a la mejora de los servicios y equipamientos, llevar a cabo estudios de medidas concretas y globales para la mejora de las condiciones sociales, económicas, culturales, educativas, sanitarias y recreativas de sus socios, además de promover el espíritu de colaboración, hermandad, amistad y solidaridad entre su asociados.