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La inversión de los últimos 2 años genera cerca de 3'7 millones de euros en la localidad

Publicada el lunes 8 de julio de 2013 a las 00:00

En actividades empresariales de nueva creación.

Juan Ramón Martínez Valero, concejal de Ciudadanos por Villarrobledo, y responsable de la concejalía de Urbanismo y Obras Públicas, ha realizado una valoración de las actividades empresariales de nueva creación durante los dos primeros años de la actual legislatura, destacando que, desde junio de 2011, se han tramitado 14 calificaciones urbanísticas en suelo rústico.

Estas fuentes, confirmaron que estas nuevas calificaciones, con un volumen en torno a 3,7 millones de euros de nuevas inversiones en Villarrobledo, suponen el asentamiento de un nuevo tejido empresarial en la localidad, representando la generación de empleo, así como de ingresos para el consistorio, via impuestos, de una serie de actividades que se establecen en suelo rústico mediante calificación urbanística.

Juan Ramón Martínez, recordó que por medio de las calificaciones urbanísticas, al ayuntamiento autoriza la instalación de actividades de todo tipo fuera de los polígonos industriales. Así, añadió que al desarrollarse en suelo rústico, deben cumplir un proceso legalmente establecido, ya que al tratarse de suelo rústico, la Ley protege esas actividades con conceptos como el canon, o el periodo en el cual debe devolverse el terreno adquirido.

El concejala de CIVI, matizó que estas calificaciones urbanísticas son sinónimo de varias cosas, como son de actividad empresarial, de licencias de obras y actividades, de generación de empleo, y por último, de generación de ingresos para el ayuntamiento, vía canon, por un valor del 2 por ciento de la inversión, y vía impuestos de obras y construcciones, por un valor del 3 por ciento de la inversión, que deben ingresas las empresas para obtener la citada calificación urbanística.

Atendiendo a los datos que ofreció, durante los últimos 24 meses, el Ayuntamiento de Villarrobledo, a través de la concejalía de Obras, ha tramitado distintas licencias municipales a empresas con distintas actividades, como han sido: Ges Residuos (planta de reciclaje de residuos de construcción); Alcázar Mancebo (granja avícola), Parcitank (nave para fabricación de depósitos de acero); Juan Martínez Tornero (nave agrícola); Ambar Ingeniería y reciclaje (fabricación de pellets); Agrocalaverón (nave para cebollas y nave para orujo); SAT Los manchegos (nave para selección y envasado de productos agrícolas); Haza Rasa (instalación solar fotovoltaica); Sondajens (taller de reparación de vehículos especiales para sondeos); Abonos y Derivados Los Poceros (Ampliación de nave a mini aerogeneradores); Cantera Vértice (cantera y planta de aglomerado); Agraria Guija (nave para ganado ovino y balsa); y Viñedos y Bodegas El Castillo (actividad de agroturismo y embotelladora).

La última calificación urbanística aprobada por el pleno ha sido la de Casa del Fraile, para un proyecto de turismo rural, que según afirmó generará, a corto plazo, entre 4 y 5 puestos de trabajo, y a medio plazo, entre 8 y 10 puestos de trabajo.

Juan Ramón Martínez Valero, aseguró que el volumen total de inversión de estos proyectos ronda los 3’7 millones de euros, de los que el 5 por ciento han ido a parar a las arcas municipales, en concepto de canos y de impuestos de obras y construcciones.

El responsable de la concejalía de Obras y Urbanismo, señaló que la mayoría de estas calificaciones han sido aprobadas por unanimidad por los tres partidos políticos con representación municipal, y destacó que dada la actual situación económica, las fuerzas políticas se pongan de acuerdo para llevar adelante este tipo de calificaciones, dejando para ello fuera las ideologías.

Por último, Martínez Valero incidía en que, desde junio de 2011, ha bajado la media de licencias de calificación urbanística que se concede a grandes empresas, aunque avanzó que hay varias en cartera, que están pendientes de la documentación y autorización pertinente de la Junta de Comunidades, con lo que, de cumplirse los trámites pertinentes, podría aprobarse su autorización en un plazo de 4 o 5 meses, entre ellas, una granja de gallinas, una nave de depósitos de acero, una planta de reciclaje de los escombros, una nave agrícola, naves para la fabricación de pélex, para almacenaje de cebollas, para selección y envasado de productos agrícolas, una instalación solar fotovoltaica en suelo rústico, y la última, un taller de vehículos especiales dedicados para el sondeo para maquinaria de carácter petrolífero, entre otras.

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